NATURALEZA, ESPIRITUALIDAD Y AMOR
La música, plena de melodías, interfiere el corazón,
El ruido, del cepillar de los techos, confunde el
oído,
La brisa de verano, refresca los cuerpos ardientes y
La florida naturaleza, invita a la reflexión de la
mente.
En el interior de la morada, los múltiples colores,
Invitan a reconsiderar la belleza de plantas
exóticas;
El brillar de limpieza en INTI HUASI adorna las
imágenes
Y escuchar
variadas conversaciones vitaliza la existencia.
El Sol desde el infinito Cosmos alumbra los
espíritus,
Que yacen permanentes en la eternidad del mundo,
Para fortalecer las vivencias de los gratos
recuerdos,
Para orientar las consciencias hacia la lucha humana.
Desde estos espacios regionales, vivos de la
creación,
Me hablan de la infinitud espiritual de los líderes,
Me conducen a la contemplación de la verdad dicha
Y me animan a retener profundamente a JESÚS,
En los más recónditos parajes nobles de mi corazón.
Vivir sin la consciencia plena en permanente
movimiento,
Realmente sería morir sin la asimilación de los
ocasos,
Sería horadar la grandeza de espacios incomprensibles
Y sufrir las justas consecuencias de la dolorosa ingratitud.
Amar es, entonces, la actitud nobilizante del
espíritu;
Si sembráramos el AMOR en la humanidad planetaria,
La libertad, la Igualdad y la Justicia prevalecerían
inmunes,
En los pueblos sufridos del mundo hostigados
inmoralmente.
JUSAVÍ.
Chachagüí, 8 de Abril de 2013.
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