ZARAGOZA, BARRIO FANTASMA

                        





                             ZARAGOZA, BARRIO FANTASMA.





Desde hace, aproximadamente,  45 ó 46 años, cunde en el pueblo, la existencia del Duende de la chorrera de la  Florida, en la Vereda de Pan chindo, al que se culpa de varios crímenes de personas, no muy cercanas a las creencias religiosas de la región.

No obstante, en el presente, se puede apreciar algo de desarrollo que ha obtenido la población, en la parte comercial y la producción observada en su mercado, pero con la convicción de su cultura legendaria.

La naturaleza, en la última década, ha perseguido, también, los espíritus crédulos de sus habitantes, mas sin reducirlos a la fantasmagoría de sus leyendas.

En tal virtud, en las afueras, vía al sur, construyeron, con el apoyo de las Instituciones, irónicamente más cercano al Coloso, un hermoso barrio con construcciones modernas, dignas de quienes mejor pudieron hacerse a ellas.

El Hospital, el estadio, piscina y otros centros de diversión desarrollaron en él. Las tiendas, hasta su propio mercado, expresaban la satisfacción de un cambio progresivo.

Poco a poco crecía, pese a la preocupación de Entidades encargadas de estudiar su ubicación, frente al coloso Volcán Galeras, el que, más frecuente que en toda su Historia, daba manifestaciones de su actividad, con pequeñas erupciones.

Detenerse cuidadosamente, hoy a contemplar al Barrio Zaragoza, convierte en realidad la mentalidad de las gentes de la zona de los hermosos floripondios. Viviendas, en su mayor parte destruidas; otras en pie, sin ventanas, sin puertas, sin techos; sus calles destrozadas; la verdad, un evidente Barrio Fantasma, que incide en los observadores las creencias de los regionales.

Su orgulloso y respetado Galeras nada tuvo que ver en esta parcial destrucción, porque varios de sus habitantes se han negado a abandonar sus viviendas, convencidos de que el hermoso Galeras nunca les ha hecho daño.

Por otra parte las gentes del casco urbano visitan el estadio, hacen uso de él y el Hospital funciona.

Ni los duendes, ni la naturaleza hicieron de este Barrio el que califico de FANTASMA. Fue el hombre, la actitud humana dirigente, quien pudo, sin lugar a dudas, buscar otros mecanismos de defensa de sus asociados.

Ya la hermosa tierra de los Floripondios, fértil, cultivada, plena de bellezas en sus paisajes, con cielos despejados, con gentes sanas, trabajadoras, divertidas, de bellas mujeres, junto a sus inigualables montes, montañas. Floridanos más y mejores anfitriones que antaño, creyentes o no, tienen esta vez, una verdadera Leyenda: un BARRIO FANTASMA.



JUSAVÍ.



Chachagüí, 29 de Octubre de 2013.

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